De aqui para atrás

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Como todos los días, Santiago, llama a sus amigos, chatea, aprovecha que tiene esas facilidades en su trabajo, él trabaja como supervisor de televentas en una mediana empresa en San Isidro, es el mejor supervisor, por eso aprovecha en hacer lo que quiere, es el consentido de sus jefes, otro de las cosas que hace en esos ratos que se toma de ocio. es escribir el borrador de una novela, pues había tomado la resolución de escribir un libro porque ya se acercaba su cumpleaños número 30, era una de las metas que se había propuesto.

Llegaba a los 30 con 80 kg de peso, algo de panzita, pues tiene una cintura de 103 cm., con un trasero de 93 cm., con 1.80m de estatura, con talla 41 de zapatos, viviendo su orientación homosexual lo mas libre que puede, además de su diagnostico seropositivo, sus padres, los familiares y amigos mas allegados lo saben, vivía la mejor etapa de su vida.

Sin pareja, pero feliz, pues le complacía no tener el cuerpo de Beto Ortiz, ni tampoco había experimentado la experiencia de estar con una mujer, algo que no envidiaba a Jaime Bayly, pero si el hecho de ser padre, algo que siempre le hubiese gustado experimentar, no descarta esa posibilidad. Sin pareja pero si había tenido una vida amorosa algo turbulenta, llena de encuentros futivos, decepciones, pero es un sobreviviente de ese malestar llamado soledad.

Aun vive con sus padres, en el Callao, en la Quinta San Francisco de Asís, en la primera escalera de la derecha, en el segundo piso en el departamento de la izquierda, en el número 14. Un tiempo estuvo viviendo en San Miguel, por diferentes motivos, volvió, también probó suerte en Miraflores y Surco, pero siempre volvía a su lugar de origen, aunque otra vez sueña con mudarse, esta vez quiere irse a San Isidro, pero aun no se anima, porque por más que quiera a sus padres, ama la independencia y la libertad que tiene viviendo solo.

Santiago lee bastante para poder inspirarse de otros escritores y terminar el borrador que prepara, aunque aveces por el trabajo, los salidas con amigos, las clases de danza, sus reuniones con su grupo de autoayuda, olvida esta labor, no tiene apuro, sabe que lo terminara en el momento indicado. Incluso evalua la posibilidad de aprender más cosas, como otros idiomas como el japonés o el quechua, aprender a jugar ajedrez, a tocar el cajón afroperuano, y sueña con tener una batería en casa. Ùltimamente se ha vuelto coleccionista de postales que le envían sus amigos que ha conocido en el chat y son de distintos continentes.

El último fin de semana, tuvo bastante salidas, una el jueves, otra el sabado y la última el lunes, sin contar la breve salida que tuve el domingo visitando un bar gay en el Centro de Lima, en la cual fue y encontró solo sexo, en la última salida, se fue a una reunión de los amigos de un ex, un ex superintendente de una distrito de Lima, no era el típico político guapo como Rafael Rey, mas bien se parecía a Chirinos Soto, al comienzo se sintió indispuesto, porque el sabado pasado, había visto a su Chirinos Soto, besándose con un amigo, le molesto un poco, pero él quería practicar una venganza, por eso se empecino en ir, pero tampoco quería ir, porque no estaba para comportarse como un chiquillo de 17 años, pero igual fue, no la paso tan mal, pero se dio cuenta, que había cometido un error en fijarse en Chirinos Soto de la Av. Perú, era momento de dejarlo en el pasado, a pesar de que le gustaba el grupo de amigos de su ex, que eran muy unidos.

Todo este mes, estaba de caprichoso, había dejado las clases de danza, porque habían cosas que no les gustaban, porque también se cruzaba aveces con su otro ex, el Profesor de Inglés, muy guapo, muy blanco, al estilo Huancayo, muy coqueto, muy conquistador y seductor, muy mentiroso, y también el tener que cruzarse con el único hombre que lo había rechazado, el ajedrecista gordito de lentes de Rimac, por eso quizás lo hacia más atractivo e irresistible, para no verlos había abandonado las clases, al volver, se encontraba más calmado, hasta encontrar alguna excusa para ponerse caprichoso otra vez.

Santiago frecuentaba y participaba de las diferentes actividades que organizaba una institución en Lince, orientada para la gente de la comunidad homosexual, allí fue donde conocio al Profesor Inglés Blanco a lo Huancayo y al Ajedrecista Gordo que lo rechazo, también conoció a mas personas, fue bien recibido, admirado y querido por muchos, Santiago siempre busco pertenecer a un grupo y ser aceptado, por eso le agradaba tanto estar alli, aunque aveces también odiaba estar allí, porque veía lo peor de la comunidad, chismes, puyas, burlas, como le había dicho alguna vez su Chirinos Soto de Av. Perú, la comunidad gay es la más agresiva.

Es que en ese espacio también le conocieron algunas historias amorosas, como El Cantante Pelirrojo y un Gordo Obsesivo, es que Santiago, estaba en la etapa que se sentía cómodo con su sexualidad, que era libre, coqueto, si le provocaba besarse con alguien lo hacía, pero no pensaba en la otra persona como lo tomaría, terminaban estando con él, para no hacerle un desaire, pero al final la relación duraba a lo más una semana, pero de pronto ya encontraba un reemplazo para el anterior, por eso para algunos quedo como una persona algo cambiante de afectos e inmadura, eso le importaba poco, pero en algún momento también se sintió fastidiado.

Con el Cantante Pelirrojo las cosas no funcionaron, porque era un artista que vivía del arte, no había mucho futuro en eso, además tenía un amor platónico con un compañero de trabajo, mucho menor que él, al comienzo se penso que este compañero de trabajo sería un problema, pero Santiago siempre se llevaba bien con todos y sobretodo con la gente joven, pero esto molesto al Cantante Pelirrojo, asi que Santiago opto por terminar, a pesar de que siempre se ve con el compañero de trabajo del Cantante Pelirrojo

Con el Gordo Obsesivo, fue pura atracción física, Santiago no era exigente con el aspecto físico pero si en el sexo, pero este gordito, quería algo más que sexo, Santiago quiso darse la oportunidad para intentar ener un relación, pero el gordo tenía otro tipo de rollos además de los carnales, rollos existenciales, era algo depresivo, eso hizo que Santiago saliera ahuyentado, el gordito insistió durante mucho tiempo, pero no con buenos resultados, aun se cruzan en esta institución pero no tienen nada, aveces se saludan, aveces conversan.

Incluso fue tentado a escribir de eso, pues quería sentirse una Carrie Bradshow, al estilo de Sex and The City, escribiendo acerca de sus aventuras amorosas, pero prefirio descartar la idea, quizás los involucrado no le iban a tomar bien, o quizás todo iba a terminar como Bayly, contando intimidades que a la gente no le debe interesar.

Respecto a los estudios, estuvo en un CETPRO, un tiempo, como recordando los tiempos que dejo la universidad, en ese lugar, se sintió otra vez como de 20 años, con la experiencia de alguien de casi 30, hice buenos amigos, tine una facilidad para caerle bien a las personas, alli conocio a JC, un tipo singular, con una nariz no tan exagerada como la de Cyrano de Bergerac, blanco, bello para Santaigo, tan física como espiritualmente, su experiencia laboral siempre fue en Seguridad y Mantenimiento, casado con una cuzqueña aguerrida, pero no bajada del cerro, con dos hijos maravillosos, se hizo amigo de Santiago, entro a su vida, a pesar de llevarse bien, para evitar que el enamoramiento, el amor o el sexo, arruine esta relación amical, Santiago decidió deshacerse de él, para alejarlo, para ello se invento una excusa para molestarse.